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Quedó firme la resolución judicial y los rugbiers franceses podrán volver a su país

Los abogados de la denunciante no se opusieron a la medida dispuesta por el fiscal adjunto en lo Penal, Gonzalo Nazar. “Podrán irse de la Argentina a partir de este momento”, explicaron desde el Minis

Quedó firme la resolución judicial y los rugbiers franceses podrán volver a su país

Los abogados de la denunciante no se opusieron a la medida dispuesta por el fiscal adjunto en lo Penal, Gonzalo Nazar. “Podrán irse de la Argentina a partir de este momento”, explicaron desde el Minis

Los rugbiers de la selección francesa, Hugo Araudou y Oscar Jegou, acusados de violar y golpear a una mujer en Mendoza, podrán regresar a su país.

En la audiencia desarrollada este martes, los abogados de la denunciante no se opusieron a la resolución del fiscal adjunto en lo Penal, Gonzalo Nazar, quien los había autorizado a salir de la Argentina.

“Por lo que queda firme dicha resolución y podrán irse del país a partir de este momento”, informaron desde el Poder Judicial.

La resolución de Nazar estaba sujeta a la audiencia que se realizó este martes ante la jueza de Garantías, Eleonora Arenas. Pero en ese encuentro en el Polo Judicial Penal, la salida del país de Araudou y Jegou “no fue tema de discusión”.

El único tema planteado en la audiencia fue el pedido de la querella de ampliar la pericia psicológica de los imputados, que deberá resolver la jueza Arenas.

El caso

Araudou y Jegou integraron el equipo francés que el sábado 6 de julio enfrentó a Los Pumas en el estadio Malvinas Argentinas. Luego, en la madrugada del domingo 7, la denunciante y Jegou tuvieron un primer encuentro en un boliche de Luján de Cuyo, ubicado a un costado del Acceso Sur.

De acuerdo con la denuncia de la mujer, posteriormente ambos se dirigieron a bordo de un Cabify hasta un hotel cinco estrellas de avenida Belgrano de Ciudad, donde fue sometida sexualmente por el tercera línea de la selección francesa y luego por su compañero de cuarto, Araudou.

Los rugbiers fueron detenidos al día siguiente en un hotel de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y trasladados a Mendoza, donde quedaron alojados a una celda de Estrada, localizada en calle Plantamura.

Luego de seis días de encierro, el Ministerio Público decidió hacer lugar al petitorio del agobado defensor Rafael Cúneo Libarona (hermano del Ministro de Justicia de la Nación) y les concedió el beneficio de la detención domiciliaria a los dos acusados, con monitoreo electrónico.

Con el paso de las semanas y ante el análisis de las pruebas, la defensa aprovechó algunas inconsistencias en el relato de la denunciante, ciertos detalles revelados en audios de WhatsApp y las ausencias de la mujer en las audiencias periciales para cuestionar la versión de la acusación.

Finalmente, el propio Ministerio Público resolvió darles la libertad a los jóvenes deportistas, aunque continuarán sometidos a proceso. En su entorno además no descartan tomar acciones legales contra la denunciante por lo que califican como “acusaciones infundadas“.

Mientras la causa se desmoronaba, la denunciante presentó una carta en la que hizo alusión a “un apriete psicológico” y aseguró: “Me sacaron las ganas de vivir”. La mujer también alegó que por problemas de salud no estaba en condiciones de afrontar la etapa judicial en la que se realizarían las pericias psicológicas.

En paralelo, sus abogados Mauricio Cardello y Natacha Romano solicitaron la recusación y el apartamiento de la causa del fiscal de Homicidios, Darío Nora, y de la jefa de Fiscales de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, Daniela Chaler, “por violencia moral y falta de objetividad”. El pedido fue inmediatamente rechazado por Nazar.

Fuente: El Sol

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